El corte de materiales
mediante el robot es una aplicación reciente que cuenta con notable interés. La
capacidad de reprogramación del robot y su integración en un sistema, hacen que
aquél sea el elemento ideal para transportar la herramienta de corte sobre la
pieza, realizando con precisión un programa de corte definido previamente desde
un sistema de diseño asistido por computador (CAD).
Los métodos de corte no mecánico más empleados son oxicorte, plasma, láser y chorro de agua, dependiendo de la naturaleza del material a cortar. En todos ellos el robot transporta la boquilla por la que se emite el material de corte, proyectando éste sobre la pieza al tiempo que sigue una trayectoria determinada.
Las piezas a cortar pueden disponerse en varias capas, unas encima de otras, realizándose el corte simultáneo de todas ellas (método de corte de patrones en la industria textil).
Si bien el oxicortante y el corte
por plasma son tecnologías muy extendidas, y consecuentemente bien conocidas,
no ocurre lo mismo en el corte por láser y por chorro de agua, de más reciente
aparición. La disposición típica del robot en el corte por chorro de agua es el
robot suspendido trabajando sobre las piezas fundamentalmente en dirección
vertical.
El robot porta una boquilla de pequeño diámetro (normalmente de 0.1mm.) por la que sale un chorro de agua, en ocasiones con alguna sustancia abrasiva, a una velocidad del orden de 900 m/s, y a una presión del orden de 4000 kg/cm². El sistema completo precisa de bomba, intensificador, reguladores de presión y electro válvulas.
El corte por chorro de agua puede aplicarse a materiales como alimentos, fibra de vidrio, PVC, mármol, madera, goma espuma, neopreno, yeso, tela, cartón, e incluso a metales como aluminio, acero y titanio. En estos casos se añade al agua una sustancia abrasiva.
Las principales ventajas del corte por chorro de agua frente a otros sistemas son:
El robot porta una boquilla de pequeño diámetro (normalmente de 0.1mm.) por la que sale un chorro de agua, en ocasiones con alguna sustancia abrasiva, a una velocidad del orden de 900 m/s, y a una presión del orden de 4000 kg/cm². El sistema completo precisa de bomba, intensificador, reguladores de presión y electro válvulas.
El corte por chorro de agua puede aplicarse a materiales como alimentos, fibra de vidrio, PVC, mármol, madera, goma espuma, neopreno, yeso, tela, cartón, e incluso a metales como aluminio, acero y titanio. En estos casos se añade al agua una sustancia abrasiva.
Las principales ventajas del corte por chorro de agua frente a otros sistemas son:
- no provoca aumento de
temperatura en el material;
- no es contaminante;
- no provoca cambios de color;
- no altera las propiedades de los materiales;
- el coste de mantenimiento es bajo.
- no es contaminante;
- no provoca cambios de color;
- no altera las propiedades de los materiales;
- el coste de mantenimiento es bajo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario